LA BOLSA POR ANTONOMASIA

Hoy puede verse cómo ciertos sujetos se pavonean por doquier. Son los mismos que llevan meses, incluso en algún caso años, caminando con el pie cambiado, anunciando catástrofes bursátiles una semana sí y otra también. Parece que hoy tienen sus quince minutos de gloria y me temo que están dispuestos a vivirlos intensamente. Tal y como veremos esta noche, con el cierre americano, tener el convencimiento de que el S&P 500 fulminaría a la baja un canal que tenía demostrada su eficacia en varias ocasiones es algo que se me escapa. Lo siento, pero carezco de las dotes adivinatorias que ciertas personas parecen tener y que hoy pregonan a los cuatro vientos. Por mi parte, seguiré haciendo las cosas como hasta ahora, intentando sacar algo en claro de los gráficos, con metodología aunque sin clarividencia, para intentar exponerlo a quienes quieran leerlo lo mejor posible. Creo que en días como hoy toca, más que nunca, ser consecuente, pues sin duda es la inversión más rentable para plazos largos.

Centrándonos en el Ibex 35, la directriz alcista verde, que había servido como soporte en septiembre y en enero, puede darse definitivamente por perdida. En los entornos de los 14.200 tiene esa línea roja inferior, y unos 200 puntos más abajo la directriz iniciada en los mínimos de junio. Si la corrección iniciada tiene una entidad parecida a la de mayo del año pasado, el soporte horizontal en la zona 13.500-13.600 debería tenerse en cuenta. En resumidas cuentas, toca estar unos días observando el comportamiento del mercado, son muchos los gráficos que han sido dañados, y aunque una sesión no hace tendencia, el golpe se ha producido en la mayoría de los casos con volumen alto, lo que le da mayor credibilidad y estaría insinuando continuidad en los próximos días. No obstante, siempre habrá quien crea que habrá rebote, aunque sea el del gato muerto, y tenga pensado aprovecharlo. Hoy traeré algunos valores cuyos gráficos muestran ciertos puntos claros donde se podría producir un eventual rebote, aunque debe tenerse cuidado, que las tendencias las carga el diablo.

Tengo pensado cerrar la noche con la actualización del gráfico del S&P 500 que se venía siguiendo desde hace tiempo, seguramente con alguna reflexión final. Por si acaso la tormenta es de las persistentes, voy a desempolvar algún manual sobre opciones y futuros que tenga por casa.